La rutina corporal para embarazadas que no se conforman con meras promesas de marketing.
3 años de I+D.
Fórmulas 100% eficaces, seguras, sin tóxicos y sin alérgenos.
¿Cuántas veces te has ilusionado con una crema hasta que la pruebas y te decepciona?
Premios, recomendaciones de influencers, un montón de reviews maravillosos…
Pero luego lo llevas a tu piel….
Y te das cuenta de que no es más que marketing con pinta de ciencia.
A mí también me pasó.
Y me llegó a obsesionar tanto el tema que acabé creando mis propias fórmulas tras mi primer embarazo.
Porque cuidar tu piel en el embarazo no debería depender del marketing, sino de la evidencia. Y porque sé lo que se siente al buscar algo que esté a la altura… y no encontrarlo.
Por supuesto, no pretendo que me creas sin más.
Quiero que la pruebes por ti misma.
Por eso he creado este kit descubrimiento para que puedas probar todas las fórmulas durante 10 días de la forma más económica posible, de ahí los sobrecitos.
Además, el coste del kit se te descuenta luego cuando compres cualquiera de los productos de tamaño normal.
- Indicada para el embarazo y lactancia
- 100% libre de tóxicos, disruptores endocrinos y alérgenos
- Cerificada por Biovidasana y Bioinspecta
- Fabricado en España por una doctora en bioquímica especializada en dermocormética
¿Por qué cree Mamanecó?
Todo empezó por una frustración personal…
Cuando me quedé embarazada por primera vez empecé a obsesionarme con que los cosméticos fuesen seguros para mi bebé, y eficaces para las nuevas necesidades de mi piel.
Investigaba, comparaba, me ilusionaba con algunas promesas…
Pero en cuanto empezaba a rascar, solo veía marketing disfrazado de ciencia.
Y en ese momento decidí especializarme en dermocosmética (sobre todo enfocada en esta etapa tan especial) y empecé a hacer divulgación científica.
Pero soy de esas personas que cuando hace algo lo hace hasta el final…
Así que di un paso más: me metí en el laboratorio.
Y me propuse crear lo que me habría gustado encontrar cuando estaba embarazada:
Solo tres fórmulas. Una rutina corporal sencilla, eficaz y 100% segura.
Sin alérgenos. Sin rellenos.
Cada ingrediente cuenta, y si no suma, no entra.
Después de tres años de investigación y desarrollo, nació Mamanecó.
No para prometer.
Sino para cuidar, con la misma dedicación que una madre.
Lo que otras marcas no te cuentan
A diferencia del sector alimentario, en cosmética los términos como natural o ecológico no están regulados por ley.
Eso significa que cualquier marca puede usarlos libremente en el envase, aunque el producto lleve ingredientes sintéticos o cuestionables.
Entonces… ¿cómo sé si es verdad?
Existen sellos de certificadoras privadas que han creado sus propias normativas y estándares para auditar y validar productos realmente respetuosos.
Pero cuidado, porque no todas exigen lo mismo: algunas son muy estrictas, otras más bien decorativas.
En Mamanecó hemos elegido la certificación más exigente, porque creemos que las promesas no se dicen, se demuestran.
Consejo: Cuando quieras verificar si un sello existe realmente busca en Google “nombre del sello + certificación oficial”. Si aparece, puedes revisar los criterios que sigue y ver así su nivel de exigencia.
La piel de embarazada es mucho más sensible y susceptible a irritación y reacciones.
Por ello hay que prestar especial atención a los alérgenos, que son sustancias que pueden desencadenar estas reacciones.
Y no, el que algo sea 100% natural no es garantía de seguridad dado que existen alérgenos naturales.
Los alérgenos más comunes son fragancias (incluso naturales), conservantes y colorantes.
¿Cómo puedes saber cuáles son? Busca en Google “Lista alérgenos declarables en cosméticos UE” y te saldrá el listado de los 14 que hay, y así poder revisar el INCI del producto cosmético que te interesa y comprobar si los tiene o no.
Por supuesto, los productos de Mamanecó no contienen ninguno, dado de que no queremos correr ningún riesgo, por mínimo que sea de que tu piel de embarazada pueda tener alguna reacción indeseada.
El INCI, también conocido como la lista de ingredientes de un cosmético, (o ese bloque de nombres raros que casi nadie mira) nos dice mucho más de lo que parece…
Si sabes qué mirar.
Tres básicos:
1. El orden importa.
Los ingredientes aparecen de mayor a menor cantidad.
Si el primer ingrediente que lees en el INCI es “aqua”, “glycerin” o “caprylic triglyceride”… ya te da muchas pistas sobre la calidad del cosmético.
2. La longitud importa.
Cuanto más larga es la lista, más ingredientes de relleno te puedes encontrar.
3. Revisa en busca de ingredientes problemáticos.
Comprueba si los ingredientes problemáticos están presentes… y en qué cantidad (recuerda, el orden manda).
Muestras de cariño
Opiniones de clientas
Podrías seguir buscando...
O puedes probar la rutina para la piel de embarazada que no necesita decorarse por fuera…
porque funciona por dentro.
